Día mundial del Rock: Sonidos de libertad

Fotografía de Laura Aguirre y Natalia Pineda (1101).

Modelo: Jostin Guiza (1101)

Un artículo de Carol Parra (10039.

El Rock, que para algunos es considerado una simple mezcla de ruidos, para otros es más que música, un sentimiento que se grita y cabecea con pasión; y hoy, día mundial del rock, podremos recordar cuán importante es este género musical para nuestra historia.

El Rock N Roll tiene su origen a mediados el siglo XX, derivado del country, del góspel, del jazz, el blues, el swing, el country y el Rhythm & Blues. Muchos son los artistas que se disputan el lugar de los creadores de la primera canción del género. Uno de ellos es justamente el denominada “Rey” del Rock And Roll, Elvis Presley, quien en 1954 aparece en la escena con la canción Thats Alrigth (mama). También el grandísimo Chuck Berry , con Maybellene. Posteriormente aparece Rock Around the Clock, de Billi Haley and his Comets en 1964. Siendo esta la primera grabación rocanrolera en llegar al número 1 en los conteos musicales.

En 1966 se destacaron The Beatles, Los Rolling Stones, The Who, Bob Dylan, Led Zepelin, entre otros. Quienes dieron una gran apertura a lo que sería el mundo del Rock. Años más tarde surgieron nuevos géneros como el Hard Rock y el Heavy metal

En los 80’s el Rock sufre un cambio neoprogresista, donde las canciones se vuelven más melódicas y sentimentales, y es ahí donde se destacan bandas y artistas como Bon Jovi, Europe, Michael Jackson, Guns And Roses. Incluyendo a Take On Me de A-Ha, You Shook Me All Night Long de AC/DC, ‘With Or Without You’ de U2, como las mejores canciones de la década, según canal musical especializado VH1. A esos artistas le debemos la forma en que sus canciones nos transmiten sentimientos, nos pueden hacer sonreír e incluso llorar recordando y viviendo nuestros momentos más importantes, mientras nos perdemos en sus melodías.

Pero hablemos también de esos artistas que no se olvidan y que nuestros padres bailaban y cantaban en las discotecas en sus años de juventud. Cómo Olvidar a Soda Stereo, a Enanitos Verdes, a Hombres G, a Los Prisioneros; a tantos artistas que incluso nosotros, cuando éramos pequeños, veíamos que nuestra familia cantaba y ahora también nosotros cantamos a todo pulmón y en nuestro idioma, pues sabemos que es guardar el legado de nuestra familia en la música.

En 1990 explota el Grunge y se vuelve conocido por una banda mundialmente exitosa, Nirvana, que con su álbum Neverland, fue la abanderada del movimiento Grunge. A pesar del suicidio de Kurt Cobain, sus canciones siguen siendo una forma de descargarse para muchos, y sigue siendo una de las más conocidas bandas del mundo.

 El primer concierto de Rock (21 de marzo de 1952) contó con la participación de Paul Williams, Ting Grimes. The Dominoes, Banny Bobb y Varetta Dillar. El imaginarse la adrenalina, la felicidad y la pasión con la que las personas llegaban a su primer concierto de rock, sin duda nos deja deseando haber estado en un momento tan apasionante e importante para la historia de la música.

Y no nos vayamos tan lejos, pues en Colombia, luego del asesinato de Jorge Eliecer Gaitán, es decir, del Bogotazo y la gran violencia que nuestro país atravesaba en ese momento, Colombia pudo dar un pequeño respiro y unirse a esta nueva era del rock, que también fue una forma de enterarse de lo que pasaba con el mundo. Yimmy Risback, hijo de padre escocés y madre colombiana, trajo a Colombia el rock en la emisora Nuevo Mundo, parte de Caracol Radio en Bogotá. Así que esto nos deja pensando cómo en medio de la violencia Colombia pudo traer una nueva forma de expresarse, de sentir y de liberarse.

Y como forma de traer no solo un artista para que haga su concierto, sino de traer a varios y formar un verdadero espectáculo, llegaron los festivales a Latinoamérica, donde hablamos de Lollapalooza, en Chile, Argentina, Brasil y desde 2016 en Colombia. Hablamos del Vive Latino en México desde 1998, donde han estado artistas como Apocalyptica, Caifanes, 2 minutos.. Rock In Rio, en Brasil, es considerado uno de los más grandes de Latinoamérica, y, por supuesto, no debemos dejar a un lado a Rock al Parque, que fue una iniciativa de Mario Duarte en 1994, y es considerado el más grande de Iberoamérica donde cientos de bandas internacionales han participado.


¿El rock ha muerto?

Pero, cerrando el telón, con la muerte de muchas estrellas del Rock (recordando el famoso club de los 27) y el surgimiento de nuevos géneros musicales, que ahora son los que atraen a las masas, queda preguntarse ¿El Rock ha desaparecido? ¿Murió este género que para muchos es su cofre de recuerdos?

El Rock no ha muerto, pero tampoco volveremos a ver fenómenos como AC/DC o Iron Maiden, pero hemos creado nuevas formas de bailarlo, poguearlo y sentirlo gracias las nuevas tecnologías y plataformas digitales de producción y difusión. El rock está, como la materia, en una constante transformación, y esto se ve reflejado con el fin de los álbumes y el inicio de las Playlist, donde podemos escuchar de todo cuando queramos, dejando de darle importancia al artista, al género, al álbum como una historia, pasamos a reducirlo a la, a lo efímero, al instante, ni siquiera importa mucho el compositor. Lo que nos queda es el legado que los artistas han dejado, que podremos escuchar e intentar revivir en algunos momentos.

No es tan malo salir de nuestra zona de confort y aceptar que tanto la tecnología como la música van cambiando, ¡ahora pueden ir de la mano! Tal vez no sea tan malo el cambio del rock, pues lo que ha quedado de él ha ayudado a las nuevas generaciones a hacer nueva música, porque ¿qué sería de un mundo sin cambios?

Claramente el Rock nos ha dejado un sentimiento y una pasión que solo puede sentirse cantando a todo pulmón, y vale totalmente la pena el reconocer a grandes artistas, a grandes movimientos que nos han hecho volar la mente y expandir nuestras formas de pensar; es un género que va más allá del ruido, es un género que une, que hace sentir la sangre hervir en tus venas y cómo tus cuerdas vocales vibran hasta casi reventar; que ha dejado mucho a una sociedad con ganas de crear.

Puede que no nos sintamos tan compatibles con él, pero nadie se puede negar a una buena canción y a esos recuerdos que quedaron marcados en ese solo de guitarra, en esa batería, en esa voz potente que por un momento nos hizo sentir libres, con ganas de gritar a los cuatro vientos, con ganas de salir; nos hizo sentir capaces de enfrentarnos al mundo y luchar por lo que consideramos nuestra libertad. Es un género que sin duda es incomparable y que lo mejor que podemos hacer es agradecer y recordar lo importante que ha sido a lo largo de nuestros años de rebeldía, inconformismo y resistencia, que se prolongarán indefinidamente mientras vivan en algún lugar de nuestra caprichosa memoria.